Estados Unidos planea una serie de cambios a su sistema de asilo que alejarían sus políticas y prácticas humanitarias implementadas durante mucho tiempo del derecho internacional, señaló la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
La propuesta “Procedimientos de asilo y exención de expulsión, revisión de temor creíble y temor razonable” plantea, entre otras cosas, un mayor escrutinio de las solicitudes de asilo cuando el peticionario haya pasado al menos por un tercer país antes de llegar a Estados Unidos y no haya solicitado refugio ahí.
El borrador de la normativa, presentado en junio, establece que “no haber buscado asilo o refugio en al menos un país por el cual haya transitado el extranjero en su ruta hacia Estados Unidos significaría una probabilidad alta de que esa persona estuviera abusando del sistema de asilo como un mecanismo para entrar y permanecer en Estados Unidos más que estar buscando protección urgente legítima”.
El proyecto de legislación también estipula que vivir ilegalmente en Estados Unidos más de un año antes de solicitar asilo se consideraría un “factor adverso significativo”. Lo mismo pasaría cuando el solicitante no hubiera declarado impuestos o hubiera cometido algún delito aunque éste hubiese sido invalidado, revocado o eliminado.