Más de 200 personas han sido detenidas el jueves 16 en París al término de una manifestación espontánea contra la impopular reforma de las pensiones del gobierno de Emmanuel Macron, aprobada unas horas antes por decreto y sin voto en la Asamblea Nacional.
Miles de personas se congregaron en la simbólica plaza parisina de la Concordia con la consigna de “bloquear el país” y la meta de tumbar al actual Ejecutivo. A final de esta manifestación, algunos de sus miembros quemaron contenedores, destruyeron automóviles y montaron barricadas.
Según la prefectura de policía de París, 217 personas fueron detenidas en la plaza de la Concordia, indicó el diario francés Le Monde, que también reporta disturbios similiares en Lyon, Rennes, Nantes y Marsella.
En Rennes, el alcalde de la ciudad denunció “una violencia asombrosa” de parte de los manifestantes.
En la ciudad portuaria de Marsella, en el sur, se destrozaron escaparates y fachadas de bancos, según
los medios de comunicación franceses. Se atribuyó al menos parte de los destrozos a grupos radicales de izquierda.
DW