El programa gubernamental brasileño “Dignidad Menstrual” ha distribuido casi 2 millones de toallas sanitarias gratuitas este año, según informó el Ministerio de Salud.
Estos productos están disponibles en las unidades de Farmacia Popular, y se espera que beneficien a aproximadamente 24 millones de personas de entre 10 y 49 años que no tienen acceso a productos menstruales.
Hasta el 24 de mayo, 1.737.061 personas ya han sido asistidas por el programa, retirando sus compresas sanitarias en las farmacias participantes. Esta iniciativa coincide con el Día Internacional de la Dignidad Menstrual.
El ministerio destaca que esta fecha, observada en más de 50 países, busca poner en relieve la pobreza menstrual y sus impactos significativos en la vida de las personas menstruantes.
Aunque la cartera no ha comentado específicamente sobre un estudio de UNICEF que señala que la menstruación segura sigue siendo un desafío en Brasil, este estudio subraya la importancia de garantizar el derecho a menstruar de manera digna y segura, con acceso a productos de higiene, especialmente para adolescentes y jóvenes, incluyendo niñas, mujeres, hombres, niños trans y personas no binarias.
Dificultades
La ginecóloga Daniela Angerame Yela, integrante de la Comisión de Ginecología Endocrina de la Federación Brasileña de Asociaciones de Ginecología y Obstetricia (Febrasgo), coincide con las preocupaciones planteadas por UNICEF.
La doctora señala que, si bien existen políticas públicas en el país que buscan abordar este problema, todavía persisten numerosas dificultades, especialmente entre las comunidades más desfavorecidas. Menciona investigaciones realizadas por estudiantes de la Universidad Estadual de Campinas (Unicamp), que resaltan las carencias en términos de higiene menstrual en poblaciones ribereñas de la Amazonia y en zonas fronterizas con alta presencia de inmigrantes. “Estas personas enfrentan considerables obstáculos”, afirma.
Agencia Brasil